Al momento de escuchar canciones que no son de genero católico, les dejamos unas cuantas ideas de como analizar si estás eligiendo bien el tipo de música que escuchas. Sabemos que la música no es mala, es más, es necesaria para toda persona al llegar esta a las fibras más intimas de nuestra alma, pero es justamente por esa razón que debemos cuidar lo que escuchamos. Los puntos a continuación nos van a ayudar en esta tarea:
- ¿Qué dice la letra?
- ¿Cómo es el ritmo? (Si es una canción bailable, a que movimientos nos induce la canción, está de más decir que el reggaeton no se justifica ya que este en cualquier modo induce a movimientos sensuales).
- ¿Qué comunica el vídeo de la canción?
- ¿Quién la canta? (De que entorno viene el artista, su vida, su contenido.)
- ¿Cuál es el “feeling” o el sentimiento con el que el cantante o grupo la canta? (Quiere decir con que motivo, dependiendo de la vida del artista cada quién escribe de acuerdo a sus gustos, afinidades y conflictos).
- ¿Cómo baila o se expresa el cantante y sus bailarines en el vídeo? (En cuestión de canciones bailables, de que manera lo baila el mismo artista).
- ¿Cómo son otras canciones de ese artista? (En especial las del mismo álbum).
- ¿Escucharíamos o bailaríamos esa canción en presencia de Dios?
Además de eso deberíamos también tomar en cuenta a qué experiencias, sentimientos o actitudes no recuerda o dispone la canción. Una canción puede ser hermosa, pero tal vez nos puede hacer acuerdo de algún momento malo de nuestras vidas, o tal vez de una experiencia errónea. Tenemos que tener cuidado ya que nos exponemos directamente a caer en tristeza y soledades.
Todo por la Inmaculada, y nada sin Ella
